Reprimir se entiende como impedir que se manifieste un impulso o se produzca y desarrolle una acción.

Hoy en día por desgracia se habla de violencia de género que mes a mes llenan los periódicos y telediarios sobre el maltrato físico y psicológico a la mujer.

Efectivamente entiendo que en menor escala y en nuestra sociedad se dan casos de violencia de género hacia el sexo masculino, pero no por ello son inexistentes, es más, me atrevería a decir que son muchos más casos de los que dan la cara.

Creo que esto es debido a una educación, donde el hombre ha sido reprimido a nivel manifestación de sentimientos como por ejemplo el llorar o bien lo mal visto que siempre ha estado el que un varón denuncie o se queje de acoso sexual o maltrato, pues sabemos que en muchas ocasiones va a ser insultado o la risa de alguno.

Frente a un caso de abuso sexual físico o psicológico la mujer se ve más apoyada por la justicia y por la sociedad. Por el contrario se pone más en tela de juicio cuando es un hombre  el que se encuentra en alguna de estas situaciones. Por tanto no solo como hombre le cuesta manifestar el agravio que recibe puesto que para él es una humillación como “sexo fuerte”, sino que además se va a dudar mucho más de su veracidad.

(María de la Oliva Abeijón)